Eso está claro. Te googleas, tu nombre aparece en muchas partes, tu imagen también. Todo contra lo que peleaste en Roma, ahora es tu aliado en Vietnam y eso te jode, pero también te alegra, entonces no sabes para dónde decidir, estás cansado.
Te busqué, te volví a buscar, así como por 10 veces y nunca entendiste las señales, las evadías, qué habilidad trapecista, por eso me enamoré de ti. Es bueno escribir sobre ti de vez en cuando, ese elixir te pone así. Estoy cansado, ¿Qué podemos hacer ahora? Ahora ya no hay nada, al menos que llegue un terremoto, de esos que ocurren una vez cada 100 años y vuelvas, pero no será así.
Escogí la soledad, porque es así, porque es mejor así, siempre ha sido mejor así. Se vienen las batallas épicas, donde saldrás derrotado o vencedor, prefiero la primera, la verdad, la segunda nunca me ha llamado la atención. Ahora sólo recuerdo la tacha que ella me dio, con su lengua, me besó y después no recuerdo nada, solo que sobreviví.
Vuelas en un avión privado hacia París, antes de despegar ves la pista, el sol cae, escena épica y así es tu vida, el dinero lo es casi todo y en ese 5% de humanidad batallas, convives, viajas, no sabes adónde irás, pero llegarás.
Pero Bielsa tenía razón, o tiene, en muchas cosas. Sus conceptos de futbol, de histeria, tristeza, son para aprender. Estoy muy cansado, mi amor, demasiado, pero Amelia está bien, tú estás bien y creo que yo soy medio famoso. El mundo equilibrado, pero si hubiera que escoger, por siempre, para siempre, hubiera escogido tu infierno, es así.
.
